Ya llevamos unas semanas de veranito en las que apetece irnos a playa y piscina. Si tienes hijos te lo estarán pidiendo constantemente.
Los niños lo pasan genial en la piscina: juegan, se divierten, se bañan… Pero para los padres en muchas ocasiones supone algunos problemas: Estar pendiente de que se eche la crema, tener cuidado con ellos cuando se meten en el agua, que beba agua para no deshidratarse, que coma…
Y ahí es donde viene lo malo: La comida.
¿Te has fijado alguna vez en qué suelen por ejemplo merendar los niños en las piscinas (también puede aplicarse a los parques…)?
Sí, vale, esas cosas las hago yo porque soy una obsesionada con mirar todo lo que come la gente cuando salgo de casa. Igual tú no lo has hecho. Pero no pasa nada, ya te lo cuento yo.
Lo normal cuando ves a los niños merendando en la piscina no es que se estén tomando una tajada de sandía o un melocotón. Es mucho más probable verles tomando patatas fritas, batidos, zumos, galletas de chocolates, bollos rellenos de chocolate, gusanitos, bocadillos de embutido…Vamos, comida basura, bollería y ultraprocesados en general.
Y yo me pregunto: si estamos tan pendientes de echarle la crema para que no se queme, o ponerle los manguitos para bañarse… ¿por qué no nos importa que coma sólo porquerías (aplicable a la vida en general, pero hoy estamos hablando de piscina)? Si dedicamos tiempo a preparar la bolsa de baño, la muda de después… ¿tanto trabajo cuesta dedicarle un poquito de tiempo también a echarle una merienda buena para cuando le de hambre?
Como siempre digo, deberíamos dedicarle mucho más tiempo a hacer buenas elecciones alimentarias, ya que de ello depende en gran parte nuestra salud y la de nuestros hijos.
Pero es cierto que muchas veces puede que no se nos ocurra qué llevar a la piscina, y se termina cogiendo lo más rápido (bueno, que esto es cuestionable). Por eso, si es tu caso, hoy quiero darte algunas ideas de qué meriendas puedes llevar para que tus hijos tengan opciones sanas y sabrosas para cuando pidan merendar. Bueno, y para ti también. Así que vamos a ello:
Estas son sólo unas pocas ideas, pero con las que puedes hacer muchísimas combinaciones.
Me encantaría ver este verano las piscinas y playas llenas de meriendas saludables, a ver si lo conseguimos.
¿Qué otras opciones sanas y sabrosas se te ocurre para echarle a tus hijos a la piscina? Cuéntamelo en los comentarios.
¡Hasta pronto!